top of page

INFECCIONES CÉRVICO-VAGINALES

 

 

INTRODUCCIÓN

 

En forma genérica, las infecciones vaginales pueden definirse clínicamente como una alteración de la ecología microbiológica vaginal que habitualmente resulta en uno o más de los siguientes síntomas y signos:

  • Flujo vaginal o leucorrea (término usado comúnmente)

  • Mal olor

  • Ardor

  • Prurito

  • Dolor

 

Desde el punto de vista microbiológico, la infección cérvico-vaginal ha sido definida por la presencia de:

  • Vaginosis bacteriana sintomática

  • Vaginitis aeróbica

  • Vaginitis por Trichomona vaginalis

  • Vulvovaginitis micótica

  • Infecciones cervicales: Chlamydia trachomatis y Neisseria gonorrhoeae

  • Micoplasmas genitales

 

 

 

VAGINOSIS BACTERIANA (VB)

 

Definición: Es una alteración cualitativa y cuantitativa de la microbiota vaginal. Se caracteriza por ausencia o escasa cantidad de Lactobacillus y su reemplazo por una microbiota compleja y abundante dominada por Gardnerella vaginalis, Bacteroides spp., Prevotella spp., Peptostreptococcus spp., Mobiluncus spp. y Mycoplasma hominis, lo que produce una alcalinización del pH vaginal.

 

Puede ser sintomática (con flujo vaginal) en la mitad de los casos y asintomática, razón por la que se llama vaginosis y no vaginitis. La causa de la VB y de la ausencia de respuesta inflamatoria local es desconocida, pero puede ser considerada como una condición de desorden microbiano e inmunológico de la mucosa. La VB con respuesta inflamatoria aumentada, se asocia con parto prematuro. Se postula que un polimorfismo genético aumenta la inflamación e incrementa el riesgo de parto prematuro.

 

Frecuencia: La VB es una enfermedad prevalente. Su frecuencia en nuestro medio varía dependiendo del grupo estudiado:

  • Embarazadas normales: 26%

  • Rotura prematura de membranas de pretérmino: 35%

  • Oarto prematuro con membranas intactas: 43%

  • Pielonefritis aguda del embarazo: 32%

 

Diagnóstico clínico: La forma más simple para diagnosticar la vaginosis bacteriana es la utilización de 2 o más de los siguientes criterios clínicos (Amsel):

  1. Flujo vaginal grisáceo, adherente, flocular, de mal olor, con escaso componente inflamatorio

  2. Olor a pescado descompuesto al mezclar 1 gota de secreción con otra de KOH 10% (prueba de KOH o aminas)

  3. pH vaginal > 5

  4. Presencia de bacterias tapizando la superficie de células epiteliales de la vagina (células guía o clue cells) al observar microscópicamente una muestra de secreción al fresco

Diagnóstico microbiológico: El diagnóstico definitivo de VB se realiza mediante tinción de Gram de secreciones vaginales. Este método se basa en cuantificar tres morfotipos bacterianos: Lactobacillus spp., que corresponden a bacilos Gram (+) grandes, G.vaginalis y Prevotella spp., caracterizados por cocobacilos Gram variable y Gram (-), respectivamente y el morfotipo correspondiente a Mobiluncus spp., que son bacilos curvos Gram variable. Se utiliza una escala de 1 a 10. Cuando el valor calculado es de 7 o más, se establece el diagnóstico de vaginosis bacteriana (criterios de Nugent).

 

Complicaciones obstétricas: La importancia de la VB en el embarazo, es su asociación con parto prematuro. Las mujeres con VB tienen 2 a 3 veces más riesgo de desarrollar un parto prematuro e infecciones puerperales. Las bacterias asociadas a VB, Prevotella, Bacteroides spp., Mobiluncus producen mucinasas que degradan el moco cervical. Se facilita el ataque por colagenasas, elastasas, IgA proteasas, producidas por F. nucleatum u otros bacilos Gram (-) anaerobios y Mobiluncus, con la pérdida de la barrera mucosa y acción directa sobre las membranas ovulares favoreciendo su rotura. Al mismo tiempo favorece la adherencia, colonización y multiplicación bacteriana.

 

Sin embargo, el desarrollo de estas complicaciones se concentra en mujeres con factores de riesgo (Ovalle y cols.) tales como:

  • Parto prematuro previo

  • Historia de abortos de segundo trimestre

  • Historia de infecciones del tracto urinario o bacteriuria asintomática

  • Episodios repetidos de infección cervicovaginal (3 o más)

  • Diabetes pre o gestacional

 

¿Cuál es el manejo de la VB durante el embarazo? Las mujeres sin factores de riesgo, debieran tratarse vía vaginal para mejorar su sintomatología. Las mujeres con factores de riesgo, deben tratarse por vía oral porque es posible que el tratamiento, especialmente con clindamicina, reduzca la tasa de partos prematuros, si es iniciado antes de las 20 semanas (Recomendación A):

  1. Mujeres sin factores de riesgo:

    • Tratamiento local con metronidazol (ovulos vaginales de 500 mg al día, por 1 semana) o clindamicina (crema vaginal, 1 aplicación por 1 semana u oral, ver más adelante)

    • No se requiere tratamiento de la pareja

  2. Mujeres con factores de riesgo:

    • Tratamiento sistémico oral con metronidazol (250-500 mg c/8-12 horas por 7 días) o Clindamicina (300 mg cada 8 horas por 7 días)

    • No se requiere tratamiento de la pareja

    • Salvo excepciones, la desaparición de la sintomatología puede ser considerada suficiente como índice de curación terapéutica

 

Durante el primer trimestre, el tratamiento puede realizarse primariamente con clindamicina, pero existe un acuerdo creciente de que el metronidazol también puede administrarse en forma segura.

 

¿Es recomendado el tamizaje universal para VB durante el embarazo? Se recomienda el tamizaje sólo en mujeres con antecedente de parto prematuro espontáneo (Recomendación A).

 

El tamizaje de VB en mujeres asintomáticas y sin factores de riesgo no se recomienda, ya que su tratamiento no se asocia con un mejor resultado perinatal. Sí es recomendado realizar, si es posible, en mujeres con antecedente de parto prematuro, puesto que el tratamiento en estas mujeres reduce el riesgo de prematurez.

 

 

 

VAGINITIS AERÓBICA (VA)

 

Definición: Cultivo (+) para bacterias cocáceas gram positivas, bacilos Gram (-), bacilos Gram (+) gruesos, aeróbicos, asociadas con aumento de leucocitos polimorfonucleares > 10 por campo, x400 al examen microscópico al fresco y ausencia o escasa cantidad de Lactobacillus. Las bacterias relacionadas con VA son Streptococcus agalactiae, Escherichia coli, Enterococcus fecalis, Staphylococcus aureus.

 

Streptococcus agalactiae (Estreptococo beta-hemolítico Grupo B): El estreptococo grupo B (EGB) es una bacteria Gram (+) de alta frecuencia. Coloniza frecuentemente el tubo digestivo distal y el aparato genital inferior de la mujer.

 

El diagnóstico se realiza tomando un cultivo en el tercio inferior de la vagina y región ano-perineal. La toma de la muestra no necesita de la colocación de un espéculo. Recordar que la mujer portadora es habitualmente asintomática y no debe esperarse la presencia de flujo vaginal.

 

La importancia de la colonización del tracto genital inferior femenino por EGB durante el embarazo es la asociación con infección grave (sepsis neonatal, neumonía congénita-connatal). La sepsis neonatal por EGB tiene una prevalencia de 1-3 por mil recién nacidos vivos en la población general y de un 14 por mil en las mujeres colonizadas. Esta cifra aumenta a un 41 por mil, si además la mujer posee factores de riesgo (se describen más adelante). Si el recién nacido desarrolla una sepsis neonatal (bacteremia, neumonia o meningitis), su riesgo de morir (letalidad) es de 5-15%, mientras que alrededor de un 20% de los sobrevivientes desarrollará secuelas neurológicas.

 

El 95% de las infecciones invasoras en Europa y Norteamérica son producidas por los serotipos Ia, Ib, III y V. En Chile por los serotipos Ia, II y III. Los factores de virulencia del EGB participantes en la infección invasiva sonadhesinas, B-hemolisina (B-h/c) (inhibida por el surfactante pulmonar) y el pigmento carotenoídeo. La carencia de anticuerpos anticapsulares maternos y la inexistencia de surfactante pulmonar en la primera mitad de la gestación, explican la gravedad de la infección (neumonía congénita), cuando se presenta a esta edad gestacional.

 

Además del riesgo neonatal, el EGB se ha asociado con bacteriuria asintomática, infección intrauterina, parto prematuro, muerte perinatal, aborto de segundo trimestre e infecciones puerperales.

 

Cuando se utilizan medios selectivos, la prevalencia de portación vagino-rectal por estreptococo grupo B en nuestro medio es de 20% (5-40% en otros países) a las 35 semanas de embarazo. Un 1-3% de los recién nacidos de mujeres colonizadas desarrollará infección neonatal clínica. Si la bacteria se localiza en el líquido amniótico, el riesgo de sepsis neonatal puede alcanzar hasta un 50%. En general, la epidemiología de la infección perinatal por EGB no parece ser diferente en nuestro país, lo que significa que alrededor de 800 niños son afectados anualmente, con 50-150 muertes neonatales atribuibles al EGB.

 

El diagnóstico se realiza tomando un cultivo selectivo (el más utilizado es el cultivo de Todd- Hewitt) en el tercio inferior de la vagina y región ano-perineal. La toma de la muestra no necesita de la colocación de un espéculo. Recordar que la mujer portadora es habitualmente asintomática y no debe esperarse la presencia de flujo vaginal. La toma de la muestra debe realizarse a las 35-37 semanas si la norma local utiliza el cultivo como método de pesquisa del EGB (ver más adelante). En las embarazadas con factores de riesgo se recomienda toma de muestras a las 15 (para evitar el aborto), 28 (para evitar el parto prematuro) y 35-37 semanas (para evitar la infección perinatal). Los test rápidos no se recomiendan en la actualidad dada su baja sensibilidad.

 

Manejo en mujeres con vaginitis bacteriana por EGB: Los fármacos de elección son ampicilina y clindamicina VO (Recomendación A). El tratamiento depende de la condición de riesgo de la mujer.

  1. Mujeres sin factores de riesgo:

    • Tratamiento sistémico oral con ampicilina (500 mg cada 6 horas por 7 días) o local con clindamicina (crema vaginal, 1 aplicación por 1 semana)

    • No se requiere tratamiento de la pareja

  2. Mujeres con factores de riesgo:

    • Tratamiento sistémico oral con ampicilina (500 mg cada 6 horas por 7 días) o clindamicina (300 mg cada 8 horas por 7 días), asociado con tratamiento local con clindamicina (crema vaginal, 1 aplicación por 1 semana)

    • No se requiere tratamiento de la pareja

    • Solicitar cultivo y Gram de control

 

¿Es útil el tratamiento intraparto en mujeres portadoras de EGB en reducir el riesgo de sepsis neonatal? El tratamiento intraparto de estas mujeres, disminuye el riesgo de sepsis neonatal por SGB, por lo que debe tratarse a todas las mujeres portadoras o con factores de riesgo de sepsis neonatal por EGB (Recomendación A).

 

Reduce significativamente (40-80%) la probabilidad de que el recién nacido desarrolle la enfermedad. El Center for Disease Control ha emanado sugerencias para prevenir esta enfermedad, centrando sus propósitos en la utilización de a) sólo factores de riesgo o b) agregar a éstos la realización de un cultivo vaginal entre las 35 y 37 semanas (ver esquema de prevención para la enfermedad neonatal por estreptococo grupo B).

 

Cada servicio debe evaluar la factibilidad de realizar cultivos para EGB. De no ser posible, el manejo puede basarse exclusivamente en la presencia de factores de riesgo, los que están presentes en un 70% de los niños que desarrollan la enfermedad y en un 25% del total de partos.

 

  1. Administrar profilaxis antibiótica intraparto SIEMPRE en los siguientes casos:

    • Antecedentes de sepsis neonatal o muerte neonatal precoz por infección en embarazos previos

    • Bacteriuria asintomática a EGB en el embarazo actual

    • Trabajo de parto prematuro (dilatación cervical > 3 cm, tocolisis fracasada, u otro signo de parto inminente)

    • 1,2 y 3 no requieren la toma de cultivos porque SIEMPRE debe administrarse profilaxis intraparto

  2. Si la norma local utiliza el cultivo de EGB a las 35-37 semanas:

    • Profilaxis antibiótica intraparto si el cultivo es positivo

    • No requiere tratamiento si el cultivo es negativo

  3. Si la norma local NO utiliza el cultivo de EGB a las 35-37 semanas:

    • Administrar profilaxis intraparto siempre si existe alguna de las condiciones descritas en A

    • Administrar profilaxis intraparto si durante el trabajo de parto se produce fiebre > 38ºC y rotura prematura de membranas por más de 16-18 horas

    • Si la mujer no tiene los factores de riesgo mencionados en A y B no requiere profilaxis intraparto para EGB

  4. Antibióticos utilizados en la profilaxis intraparto, en orden de preferencia:

    • Penicilina sódica 5 millones IV de carga, luego 2 millones IV cada 4 horas hasta el parto

    • Ampicilina 2 gr IV de carga, luego 1 gr IV cada 4 horas hasta el parto

    • Eritromicina 500 mg IV cada 6 horas hasta la resolución del parto

    • Clindamicina 900 mg IV cada 8 horas hasta la resolución del parto

 

Recordar que la profilaxis es sólo durante el trabajo de parto. No se justifica administrar antibióticos antes del inicio del trabajo de parto (riesgo de recurrencia y resistencia), ni después de ocurrido el nacimiento. Si al momento del parto la mujer está recibiendo alguno de estos antibióticos por otra razón (por ejemplo por una rotura de membranas de pretérmino), no se requieren antibióticos adicionales. La cesárea de rutina no reduce el riesgo de infección neonatal.

VAGINITIS POR TRICHOMONA VAGINALIS

 

Definición: Es una infección producida por el protozoo Trichomona vaginalis (TV), que puede infectar el aparato genitourinario de hombres y mujeres. Es una enfermedad de transmisión sexual. En la mujer causa un cuadro vaginal inflamatorio caracterizado por flujo vaginal verdoso, ardor, prurito y disuria.

 

Frecuencia: La TV puede encontrarse en la vagina en forma asintomática, en una proporción de embarazadas (10%). La vaginitis por TV tiene una frecuencia que oscila entre el 10 y 20%.

 

Diagnóstico: Se realiza ante la presencia de:

  • Descarga vaginal purulenta, verdosa o cremosa

  • Ardor, dolor vaginal, prurito y disuria

  • Eritema vaginal, cérvix inflamatorio

  • Observación de TV en el examen al fresco o Pap

 

Complicaciones obstétricas: Son parto prematuro y bajo peso de nacimiento. Existe asociación significativa, entre infección por TV sola o asociada con vaginosis bacteriana y C. trachomatis con parto prematuro y niños con bajo peso al nacer, especialmente en la población negra, donde TV es más prevalente. La TV se ha aislado desde el líquido amniótico, desconociéndose con certeza su papel patógeno en estas circunstancias.

 

Tratamiento de la TV: El tratamiento de elección es metronidazol y tinidazol (Recomendación A).

  • Se aconseja tratamiento a la pareja y abstinencia sexual durante el tratamiento

  • Tratamiento farmacológico:

    • Metronidazol 2 gr oral por 1 dosis

      • El uso de metronidazol durante el primer trimestre no se ha asociado con anomalías fetales

    • Tinidazol 2 gr por 1 dosis

    • Metronidazol 250 mg oral cada 12 horas por 7 días

  • Alternativa: Clotrimazol óvulos de 100 mg por 6 días

 

¿El tratamiento de la TV reduce el riesgo de parto prematuro? El tratamiento de la TV no reduce el riesgo de PP (Recomendación A). El tratamiento de la TV puede incluso incrementar la incidencia de parto prematuro. Se postula que la muerte del parásito, liberaría gran respuesta inflamatoria y un virus de RNA, albergado en la T. vaginalis, que aumentaría el parto prematuro.

 

Tamizaje: El tamizaje y tratamiento de la tricomoniasis asintomática no se recomienda, por no relacionarse con parto prematuro. La TV incrementa el riesgo de infección por VIH y su tratamiento permite disminuir la transmisión vertical.

 

 

 

VULVOVAGINITIS MICÓTICA

 

Definición: La infección por hongos afecta frecuentemente a la embarazada, produciendo un cuadro caracterizado por flujo vaginal blanco y prurito intenso. El agente causal más frecuente es la Candida albicans, el cual coloniza el 30% de las embarazadas, mientras que la infección sintomática (vulvovaginitis micótica), tiene una frecuencia promedio de un 10-15%.

 

Diagnóstico:

  1. Flujo vaginal blanco o cremoso, con grumos

  2. Prurito vaginal muy intenso

  3. Eritema vaginal y vulvar. Puede haber lesiones producidas por grataje y sobreinfecciones.

  4. Puede aparecer disuria y dispareunia.

  5. Observación microscópica de hongos en una preparación fresca de secreciones vaginales tratada con hidróxido de potasio al 10%

La infección vaginal por Candida albicans, no se asocia con un aumento de las complicaciones obstétricas. Su presencia no está asociada con parto prematuro o rotura de membranas de pretérmino. Infrecuentemente estos microorganismos pueden aislarse desde el líquido amniótico, especialmente en mujeres portadoras de DIU. En raras ocasiones el recién nacido desarrolla una infección micótica, de preferencia en la piel y cavidad oral.

 

La característica más importante de la enfermedad es la intensidad de la sintomatología que produce. Si el cuadro es persistente o recurrente, deben descartarse condiciones subyacentes tales como: diabetes, inmunodepresión y administración concurrente de antibióticos.

 

¿Cuál es el manejo de la vulvovaginitis micótica durante el embarazo? El tratamiento antifúngico puede ser tópico (intravaginal profundo y sobre la piel vulvar) u oral (Recomendación A):

  • Clotrimazol, 1 óvulo vaginal (100 mg) en la noche por 6 días; crema 2 veces al día por 6 días.

  • Nistatina, 1 óvulo vaginal (100.000 UI) cada 12 horas por 6 días; ungüento 2 veces al día por 6 días.

  • Fluconazol, 1 cápsula (150 mg) por una vez.

  • Clotrimazol 1 óvulo vaginal de 500 mg en la noche por 1 vez.

  • Otras alternativas: miconazol, butoconazol, y otras.

  • Durante el primer trimestre, preferir clotrimazol, nistatina y miconazol ya que se han utilizado por muchos años, sin que exista evidencia de teratogénesis.

 

En la candidiasis recurrente se aconseja tratamiento a la pareja y abstinencia sexual durante el tratamiento.

 

 

 

INFECCIÓN CERVICAL POR CHLAMYDIA TRACHOMATIS (CT)

 

Definición: Chlamydia trachomatis (CT) es una causa frecuente de enfermedad en hombres y mujeres. Cuando infecta el tracto genital, puede transmitirse sexualmente y producir infecciones del tracto genital bajo, enfermedad inflamatoria pélvica, infertilidad conyugal, conjuntivitis neonatal y neumonía del recién nacido.

 

Frecuencia: La prevalencia de infección cervical por CT varía ampliamente entre 2 y 30%. En Estados Unidos el promedio es 5% entre mujeres sexualmente activas. La frecuencia en nuestro medio es:

  • Rotura prematura de membranas de pretérmino: 3.8%

  • Parto prematuro con membranas intactas: 4.8%

  • Embarazadas de alto riesgo: 5.9%

 

CT tiene varios serotipos. Los serotipos D hasta K causan infecciones urogenitales. Los de mayor prevalencia en el mundo son E, F y D. En Chile el más frecuente es el E. Este serotipo causa generalmente infecciones asintomáticas. Esto explicaría su mayor diseminación en la población.

 

Diagnóstico: Sospechar cuando se constata cervicitis mucopurulenta y en mujeres con riesgo de ITS. Estudiar gonococo en forma simultánea (ver más adelante). En las muestras endocervicales (1 a 3) realizar:

  • Inmunofluorescencia directa (IFD)

  • Ensayos inmunoenzimáticos (Elisa)

  • Cultivo celular (células McCoy)

  • Reacción de polimerasa en cadena

 

Complicaciones obstétricas: Actualmente se acepta que CT produce aborto retenido y parto prematuro. Además importante es el efecto potencial de CT sobre el recién nacido. Los RN pueden desarrollar conjuntivitis de inclusión y neumonía. Al menos la mitad de los recién nacidos expuestos a una infección materna por CT pueden colonizarse. Un tercio del ellos desarrolla conjuntivitis y un 10% puede padecer neumonia por CT en los siguientes 3 meses.

 

¿Cómo se maneja la infección por CT durante el embarazo? El tratamiento de elección es la Azitromicina. Se aconseja tratamiento a la pareja y abstinencia sexual durante el tratamiento.

  • Azitromicina 1 gramo por 1 vez vía oral

  • Amoxicilina 500 mg c/8 horas por 7 días vía oral

  • Eritromicina 500 mg c/6 horas por 7 días vía oral

INFECCIÓN CERVICAL POR NEISSERIA GONORRHOEAE (NG)

 

Definición: Es una enfermedad que se transmite sexualmente con una elevada tasa de contagio. La gonorrea afecta primariamente el tracto genitourinario de hombres y mujeres. En la mujer se localiza de preferencia en el canal cervical en forma asintomática. Una fracción de estos casos (20%) puede producir signos y síntomas que son el resultado de cervicitis mucopurulenta y uretritis. Un 0.5-7% de las embarazadas son portadoras de Neisseria gonorrhoeae, dependiendo de los factores de riesgo y de los sitios utilizados para aislar el germen (canal endocervical, recto y faringe).

 

Diagnóstico:

  • Sospechar en mujeres de alto riesgo de ITS (contacto de un caso, presencia de otras infecciones de riesgo, múltiples parejas sexuales, etc.) e infección vaginal recurrente

  • Flujo vaginal purulento verdoso, resistente a tratamiento habitual

  • Cervicitis mucopurulenta

  • Descarga uretral purulenta (exprimir si hay duda)

  • Disuria

Diagnóstico microbiológico:

  • Cultivo en medio de Thayer-Martin

  • Tinción de Gram que muestra diplococos Gram (-) intracelulares (sensibilidad de sólo 60%)

 

Complicaciones obstétricas: La presencia del gonococo en el tracto genital inferior, aumenta 2 veces el riesgo de trabajo de parto prematuro y rotura de membranas de pretérmino. Además, las mujeres portadoras pueden transmitir el microorganismo al recién nacido, favoreciendo la instalación de una oftalmopatía que puede conducir a la ceguera.

 

Manejo de la infección por NG durante el embarazo: El tratamiento de elección es la ceftriaxona IM (Recomendación A). Se aconseja tratamiento a la pareja y abstinencia sexual durante el tratamiento.

 

Tratamiento farmacológico durante el embarazo:

  • Ceftriaxona 250 mg IM por una vez

  • Cefotaxima 500 mg IM por una vez

  • Ceftizoxima 500 mg IM por una vez

  • El gonococo ha adquirido una importante resistencia a las penicilinas, por lo que se desaconseja su uso

 

 

 

INFECCIÓN POR MICOPLASMAS GENITALES

 

Definición: Son las bacterias más pequeñas descritas. No tienen pared celular, se rompen con la tinción de Gram y son resistentes a antibióticos B-lactámicos.

  • Especies:

    • Mycoplasma: M.hominis, M. genitalium

    • Ureaplasma spp: U.urealyticum, U. parvum

 

Frecuencia: Se adquieren al inicio de la actividad sexual. Luego pasan a integrar la microbiota comensal (son patógenos oportunistas). M. hominis se aisla en el 60% de mujeres con VB y en 10 a 15% de mujeres con microbiota normal, mientras que la colonización por ureaplasmas varía entre 40% y 80%.

 

Diagnóstico: Es habitualmente por cultivo. Las muestras de secreción vaginal tienen un mejor rendimiento que las del endocervix y se transportan en medio buffer sacarosa fosfato (2SP). El cultivo de los micoplasmas genitales incluye una combinación de caldos diferenciales y agar A7. La PCR con alta sensibilidad y especificidad se usa en muestras respiratorias de prematuros. M. genitalium crece lentamente en cultivos y se prefiere la PCR como método diagnóstico.

 

Complicaciones obstétricas: Ureaplasma spp no produce signos/síntomas de infección vaginal o cervical. Su aislamiento a nivel vaginal se relaciona con parto prematuro. La infección intraamniótica por esta bacteria se asocia con enfermedad crónica pulmonar en niños prematuros menores de 1500 g de peso al nacer. Pero su aislamiento en líquido amniótico produce menor resultado adverso perinatal que otras bacterias.

  1. M. hominis: Es componente de la microbiota de VB y produce signos inflamatorios

    • Se asocia con parto prematuro

  2. M. genitalium: Se ha asociado con cervicitis mucupurulenta

    • No se ha demostrado que su detección en la vagina de la embarazada se relacione con parto prematuro

 

¿Cuál es el tratamiento de la infección por Mycoplasma genitalis durante el embarazo? Eritromicina para ureaplasma, Clindamicina para Mycoplasma hominis (Recomendación A).

 

  1. Ureaplasma:

    • Sensible: Macrólidos

    • Resistente: Clindamicina

    • Eritromicina (base): 500 mg oral cada 6 horas por 7 días

  2. Mycoplasma hominis:

    • Sensible: Clindamicina

    • Resistente: Macrólidos

    • Clindamicina: 300 mg oral cada 6 horas por 7 días

 

¿El tratamiento de la infección por ureaplasma spp reduce el riesgo de prematurez? No se ha observado reducción del riesgo de parto prematuro con el uso de antibióticos (Recomendación A). El tamizaje y tratamiento posterior de la infección por ureaplasma spp no reduce el nacimiento prematuro, por lo que no se recomienda el tamizaje universal.

bottom of page